TRABAJANDO CON LA LOMLOE: CENTROS PRIVADOS & CONCERTADOS VS CENTROS PUBLICOS

En nuestra última sesión en el aula, trabajamos sobre la ley actual que rige nuestro sistema educativo, en concreto la LOMLOE. Una forma que tenemos para ver como va evolucionando (a veces involucionando) una sociedad es viendo los cambios legislativos, que se añade en las nuevas leyes, qué se suprime y qué se modifica. Es precisamente eso, o al menos en parte, lo que trabajamos en esa sesión.

Para ello nos dividimos en grupos, al mío le tocó trabajar en como la LOMLOE ha realizado modificaciones en cuanto a la escolarización en centros públicos y privados concertados.

Lo más evidente y lo primero que salta a la vista, no solo en nuestra parte, sino en toda la ley, es la modificación hacia un lenguaje más inclusivo, sustituyendo la palabra alumno, por la de alumnado o alumno y alumna. En línea con esta inclusión, también se ve en nuestra parte, y por lo que comentan el resto de compañeros, en el resto de partes también, es que hace hincapié en evitar la segregación y la discriminación, sin mayor diferenciación.

Otros cambios que se incluyen y en los que no voy a profundizar, son que la ley obliga a la administración a contar con un número de plazas mínimas que se ajusten al menos a la demanda, esto quiere decir que para cerrar un centro público, por ejemplo en un pueblo con poco alumnado, este alumnado tienen que tener una alternativa relativamente cercana. En esta línea se incluyen conceptos como el de caminos escolares seguros y sostenibles. Además también indica que las plazas publicas tendrán que ser incrementadas progresivamente.

A mayores también hace hincapié en la utilización de las TICs y obliga a cumplir con la protección de datos (que a veces puede ser un punto limitante a la hora de poder contactar con el entorno del alumnado)

Revisando los apartados referentes a los centros de educación privados, a los concertados y a los públicos no encontramos ninguna diferenciación reseñable que obligue a cumplir a unos centros en detrimento de los otros. Esto puede parecer una obviedad o no parecer importante pero lleva un trasfondo que hay que analizar para ver que a mi modo de ver implica un cambio bastante sustancial (al menos en la teoría), profundicemos un poco en ello.

En concreto, me vuelvo a referir a la segregación y a la discriminación. Hasta ahora, podía haber centros privados (y en menor mediad concertados) sólo para chicos o sólo para chicas, que no admitieran ingresos alegando un motivo religioso o de etnia pero gracias a la LOMLOE esto ya no se puede dar. Pero claro hecha la ley, hecha la trampa. Por mucho que la ley obligue, hay centros que pueden alegar que por ejemplo no tienen solicitudes de alumnado femenino para seguir con una segregación de facto. La ley es buena en este sentido, pero no perfecta. Estuvimos debatiendo sobre ello y llegamos a la conclusión de que debería incluir un porcentaje mínimo por género (hablamos de un porcentaje mínimo realista de al menos un 10% en lo relativo al género). Es cierto que esto solo solucionaría la segregación por género y quizás no sea aplicable a otro tipo de segregaciones (como por ejemplo la religiosa) teniendo en cuenta la poca heterogeneidad de nuestra sociedad en este sentido, pero oye, por algún punto hay que empezar y cualquier pasito para adelante siempre es positivo.

Concluyendo, la LOMLOE incluye avances muy importantes en cuanto a igualdad (a veces equidad con las personas más desfavorecidas) a todos los niveles, pero aun así, se queda algo corta teniendo en cuenta la realidad de la sociedad actual. La sociedad avanza 2 pasos, mientras que nuestro sistema educativo solo uno y medio.